EL SISTEMA PREVISIONAL CHILENO
Reflexión académica
( 2024,1)
El sistema previsional chileno otorga a los afiliados beneficios clave como pensiones de vejez, invalidez, sobrevivencia y la cuota mortuoria. Al llegar a la edad de jubilación, 65 años para los hombres y 60 para las mujeres, las AFP calculan la pensión tomando en cuenta las cotizaciones obligatorias, el bono de reconocimiento (si corresponde), ahorros voluntarios como la Cuenta 2, el Ahorro Previsional Voluntario (APV) y los depósitos convenidos entre trabajador y empleador. Este total se usa para determinar el monto de la pensión a través de una fórmula establecida.
Para tener una idea, con un ahorro de $100.000.000, se puede obtener una pensión de aproximadamente entre $400.000 y $500.000. Sin embargo, surge la pregunta: ¿qué podemos hacer para mejorar estas pensiones? Entre las posibles soluciones, se sugiere aumentar la cotización previsional entre un 20% y 25%, con una estructura tripartita que involucre al Estado, al trabajador y al empleador, con un componente solidario. Además, es crucial que el sistema sea transparente y que las entidades fiscalizadoras cumplan su labor para proteger los fondos de los trabajadores.
Es igualmente importante que en colegios y universidades se enseñe cómo funciona el sistema previsional, abordando temas como la rentabilidad, el rol de la mesa de dinero, las entidades fiscalizadoras y los beneficios tributarios. Las soluciones para el sistema previsional deben ser de fondo y estructurales. Por ello, invito a los diputados, senadores y al gobierno a legislar de manera efectiva sobre esta materia, cerrando todas las puertas al mal uso y abuso de las cotizaciones.
Según un informe del Banco Mundial (Cohen & Dijkman, 2021), “el sistema de pensiones chileno ha contribuido significativamente a la diversificación y estabilidad del sector financiero, promoviendo un crecimiento económico sostenido. Sin embargo, es necesario evitar retiros adicionales de los fondos y aumentar la tasa de contribución, incluyendo una aportación de al menos el 6% por parte del empleador para mejorar los niveles de pensión” (p. 15).
Asimismo, si se aumenta la edad de jubilación, es esencial regular el mercado laboral para que las personas mayores de 55 años no queden cesantes. Se hace necesario también subir los sueldos para nivelar el terreno. El propósito final del sistema previsional debe ser beneficiar a los afiliados-trabajadores, tal como en una empresa donde el centro son los clientes. De este modo, lo que todos deseamos es recibir al final de nuestra vida laboral una pensión digna, reflejo de nuestro esfuerzo y trabajo.
"Lo importante es que cuando llueva, todos podamos mojarnos".
Referencia bibliográfica
Cohen, C., & Dijkman, M. (2021). Chile - Financial Sector Assessment Program, November 2021: Pension System. World Bank. https://openknowledge.worldbank.org/handle/10986/37751
Manuel Carvajal Navarro
Académico gestión comercial y de marketing
Ingeniero en administración de empresas
Magíster en administración de empresas