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Lunes 7 de enero de 2019

Unap trabajando para formar profesionales integrales que entiendan la interculturalidad

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Chile y específicamente la Región de Tarapacá presentan una diversidad étnica y cultural que sin duda debe ser entendida y respetada , así por lo menos lo entiende la Universidad Arturo Prat  que en el proceso de formación de sus  profesionales  considera la valoración  de los saberes ancestrales en distintas áreas del conocimiento. Es en este marco que la Facultad de Ciencias de la Salud está llevando a cabo un trabajo que rompe paradigmas y está formando personas  capaces de  entender y respetar su entorno. De esta manera, ya de manera permanente las carreras de Enfermería y Sicología han incorporado actividades curriculares que contribuyen a ver y valorar las culturas presentes, iniciando este proceso de manera incipiente también la carrera de Química y Farmacia.

Pero este trabajo no ha sido en solitario, sino que se ha contado con el apoyo de  la Unidad de Salud y Pueblos Indígenas de la Seremi de Salud, quien trabaja con las comunidades aymaras y quechuas. Es así como el viernes pasado con la presencia del Seremi de Salud, Manuel Fernández;  el Decano de la Facultad de Ciencias de la Salud, Dr. Julio Benites, académicos y estudiantes de las carreras de Enfermería y Sicología se desarrolló  el cierre de la actividad curricular Salud Aymara.

En la oportunidad el seremi  destacó el  trabajo de carreras de la Facultad de Ciencias de la Salud de la UNAP." Tenemos una región multicultural y por lo tanto la forma en que la salud en carreras como Enfermería y Sicología se aborda, debe tener esa mirada y ese respeto por las distintas culturas. Sin duda este es un gran avance y demuestra como la UNAp está trabajando por formar a los mejores profesionales que entreguen una excelente atención a todos los pacientes".

Asimismo, instó a los estudiantes a valorar y aplicar en su vida profesional lo que han aprendido, felicitando a los académicos y especialmente a Alejandra Flores, jefe de la Unidad de Salud y Pueblos Indígenas por el trabajo de coordinación con la UNAP.

En tanto, el Decano de la Facultad de Ciencias de la Salud, Julio Benites destacó el gran beneficio que está iniciativa representa no solamente para los futuros profesionales sino también para las comunidades. "Lo importante de esta instancia es que los jóvenes entienden que la cultura ancestral y los conocimientos aprendidos tradicionalmente en el aula pueden ser compatibles, permitiéndoles a los estudiantes conocer  y respetar la sabiduría  milenaria y conocimientos del mundo Aymara para atender a los pacientes. Otro elemento que creo que es trascendental es esta alianza con  la Seremía de Salud, que sin duda nos permite formar de manera integral a nuestros jóvenes ".

 

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Por otra parte, Aurora Cayó, Yatiri, agradeció la oportunidad que le ha otorgado la UNAP y la Seremía de Salud para aplicar la sabiduría ancestral en este ámbito enseñando a los estudiantes y destacó cómo hoy esta actividad que comenzó de manera muy tímida ha tomado fuerza .

En tanto, Alejandra Flores, encargada de la Unidad de salud y Pueblos Indígenas afirmó que se tiene  una línea de trabajo que fortalece las competencias interculturales en los recursos humanos del sector salud, lo cual es fundamental si se analiza que  en el último censo un  25% de la población de la  región de Tarapacá se reconoce como parte de la población indígena",  precisa Es así como a través de clases con los tradicionales encargados de la salud en las comunidades como parteras, yatiris y otros, los estudiantes están adquiriendo una mirada más amplia respecto a los temas de salud, posibilitándoles abordar su labor profesional de otra forma y mejorar su atención del pueblo aymara y quechua.

Finalmente, Patricia Vigueras y Beatriz Carrasco, enfermeras y gestoras de esta gran iniciativa manifestaron que esta experiencia ha sido un gran aporte, tanto para los estudiantes como para los académicos, ya que mediante un proceso dinámico y permanente de comunicación y aprendizaje entre culturas, los jóvenes  conocen sus maneras de ver la vida,  enfermedades, creencias y todos aquellos aspectos propios de la cultura. Estos saberes que  son compartidos en clases, enriquecen sus vivencias en las distintas prácticas, otorgándoles un sello que los define y los diferencia de otros jóvenes que estudian la misma carrera.